miércoles, 23 de abril de 2025

Triste realidad nacional...

 

El síndrome del mexicano chingón. 

Quiero aprovechar este espacio para abordar un tema actual, que no pasa de moda y dudo que llegue a pasar, si no tomamos una decisión fuerte los ciudadanos. 

Quienes nacimos en alguna fecha durante los 50 años de la segunda mitad del siglo XX, hemos vivido múltiples crisis. Que van de constantes problemas económicos (devaluaciones, errores de diciembre, bajos crecimientos, pocas oportunidades laborales, etc.), hasta enormes catástrofes naturales (temblores, inundaciones…), pasando por la zozobra de la creciente inseguridad. Nos ha tocado ver desfilar cualquier cantidad de líderes y pocos o ninguno han estado a la altura de sus responsabilidades sociales y humanas. Siendo el principal problema la ausencia de líderes en toda la extensión de la palabra. (Se ha devaluado mucho este concepto) 

 Las características profundas de quienes ostentan actividades de dirección en México, se encuentran ligadas a patrones socio-sicológicos profundos y reveladores que integran lo que suele llamarse mexicanidad o la cultura mexicana. 

Nuestro paisano Samuel Ramos señala que la cultura de México es derivada porque se ha alimentado durante gran parte de su historia de la europea, ya que la indígena fue destruida totalmente. Los mexicanos no hemos sido nosotros mismos –con las respectivas cualidades y defectos., sino que nos hemos ocultado bajo la imitación de lo extranjero –para crear una apariencia de cultura-, lo que no es más que un mecanismo sicológico de defensa ante nuestra realidad. Este significativo hecho nos ha llevado a auto denigrarnos y a desarrollar un profundo sentido de inferioridad. Lo que nos ubica en una existencia ficticia que se distingue por ciertos rasgos negativos como la pedantería y el machismo: esto es, los rasgos del chingón. 

Así, para ser chingón se requiere de las características siguientes, todas aceptadas socialmente e inclusive exigidas a quien aspira a ser líder en nuestro entorno: 

1.- El poder económico. Muchos, demasiados de los mal llamados líderes actuales van tras el poder político y social, como medio privilegiado para obtener el enriquecimiento económico personal. La inmensa mayoría de las fortunas acumuladas por políticos resultan al paso del tiempo inexplicables y cuestionables. Sin embargo, son sus propios seguidores, agremiados, votantes, incluso colaboradores, los que motivan a estos parásitos a vivir de manera grosera, ostentosa en lujosas residencias, vestir ropa de marca, comer en restaurantes caros, traer autos de catálogo, etc. porque para el vulgo, entre más se hace esto, más poder se tiene. 

2.- La incongruencia. La mentira es la más común realidad compartida por nuestro entorno social (sobre todo los políticos), por medio de esta, manejan su presencia en los medios masivos de comunicación. Por ejemplo, un día afirman que no subirá la gasolina o el precio de la canasta básica, y todo mundo acepta sumisamente que la realidad será exactamente lo contrario. Es asombroso el cinismo de algunos políticos cuando se desdicen de alguna frase o declaración realizada, en muchas ocasiones lanzando la responsabilidad al reportero que grabó el disparate en turno. Dos sexenios atrás el vocero presidencial (Rubén Aguilar) se hizo famoso con su frase lo que el presidente quiso decir… 

3.- La arrogancia. Para ser líder tienes que parecerlo, se afirmas en diversos cursos sobre liderazgo. Obvio nuestros modelos de rol han transitado de los imponentes penachos de los Tlatoanis aztecas, a las imágenes simbióticas de los conquistadores españoles con sus armaduras montados en sus caballos –hasta entonces desconocidos en América-, llegando al actual derroche de prepotencia de los guaruras que atropellan y maltratan a quien se interponga en el camino del poderoso, a bordo de enormes camionetas último modelo, vidrios polarizados. A mayor aparato de seguridad, mayor estatus del protegido. 

4.- La falta de respeto. Un chingón, no tiene por qué hacer colas ni ingresar a las vías de tránsito ordenadamente. Tampoco tiene por que respetar s la naturaleza ni protegerla. Con cierto temor y asombro, se habla de las formas que adoptan algunos prepotentes  ya sean políticos, empresarios, artistas o narcotraficantes. Se afirma que si los mexicanos fuéramos más respetuosos, otras circunstancias viviríamos. 

Los poderosos actuales pueden romper cualquier ley, regla o reglamento, lanzando la típica e idiota advertencia: tú no sabes quién soy, intentando amedrentar al ciudadano común y corriente. 

Dentro de las organizaciones (se entiende la administración pública en sus tres niveles de gobierno: federal, estatal y municipal), este tipo de dirigente no aporta mucho al eficiente funcionamiento de aquellas. Al concentrarse en sí mismos y sus necesidades dejan de servir, no buscan el bien común; van tras la consecución de sus intereses personales. Favorecen el cuatismo, forman cofradías y pequeños virreinatos. Integran cortes de seguidores, que sólo esperan el momento de asumir las posiciones de poder para repetir las conductas carentes de ética de quienes fueran sus maestros, sus jefes. No promueven el aprendizaje transformador en las organizaciones: sus propias limitaciones  los estancan. No son facilitadores ni promotores de la evolución de la sociedad. 

El principal problema es la indiferencia de la sociedad que acepta estos comportamientos como normales al tiempo que algunas autoridades fomentan y participan en la impunidad. Si todos son iguales ¿Quién los va a juzgar? 

Mucho se ha escrito en relación a la raíz de la corrupción, prepotencia, incongruencia, falta de respeto y ambición desmedida de algunos de nuestros actuales políticos u hombres que ostentan el poder. Se afirma que la tradición española de vender los puestos públicos al mejor postor, es parte del origen de todo este aparato de impunidad. Como recordarás amable lector, que el comprador sabía que por medio del puesto adquirido en la Nueva España, pronto recuperaría lo invertido. ¿Verdad que esto no ha cambiado? Mientras lo sigamos permitiendo, no debemos quejarnos.

martes, 22 de abril de 2025

¿Tu que opinas?

 

Comemos limpio y sano. 

Para nadie es un secreto que el mexicano, está curtido del organismo, por todo lo sucio que se lleva a la boca y al estómago, claro que hay países peores que nosotros, como la India, pero esa es otra historia. 

Se de casos de mucha gente, mujeres, sobretodo, que preparan sus alimentos, para sí o para su familia, sin la menor higiene posible, así como llegan de la calle, así cocinan lo que traen, carne de res, cerdo, pollo, pescados, mariscos, etcétera, así como toda clase de frutas, verduras y cualquier vegetal. 

No enjuagan, mucho menos lavan la carne, así como viene, la colocan en el sartén, cacerola o wok, y si te detienes a analizar un poco, lleva sangre, vísceras, y lo que se le pega desde que matan al animal de que se trate, durante todo su recorrido hasta que lo adquieren y cocinan, lo mismo pasa con las frutas, si bien les va, la tallan en su ropa y para la boca, las verduras que también llevan tierra y otros microorganismos, si acaso los pasan por el chorro del agua y a cocinarlas. Algunas frutas y verduras, se pelan, eso ya les reduce la suciedad que traen de origen, pero hay otras que tienen su corteza con pliegues y más que necesitan una limpieza más profunda, como la fresa, o vegetales que también por su formación requieren algo más que una simple salpicada de agua, como el cilantro o el perejil. Pero no se pone atención en eso, se cree que por ser alimentos naturales ya son sanos comerlos así. 

De por sí, quien no ha hecho o visto, que en las parcelas, la gente defeca y orina, porque ahí no los ven, eso contamina la planta de que se trate, desde la raíz, eso sin contar que los fertilizantes, el agua con la que se riega y demás, ya están contaminados, para que todavía se incremente con la falta de asepsia adecuada en su preparación. Pero así lo acostumbra la mayoría. 

Por otro lado, como así se acostumbran a hacerlo, cuando venden comida en la calle, sea casa por casa, en un puesto semi fijo, fijo, o que trabajen en el más caro restaurante, que se cuente con todos los blasones que hay, las estrellas Michelin y demás, siempre hay niveles de contaminación en los alimentos. Peor aun es en los puestos o ventas callejeras. Los taquitos del ingrediente que sea, que tanto disfrutamos a cualquier hora del día los mexicanos, son de los más contaminados porque llevan cilantro y cebolla (dicen los chilangos, llorona y pasto), hay que ver como se preparan y como se trasladan hasta el lugar de la venta, te asustas cuando los ves, pero como todo, solo por un determinado tiempo, el mexicano es de memoria corta, así sea para cuidar su salud, además, en este caso, porque así esta acostumbrado a hacerlo en su propia casa, por lo que no le preocupa ver como lo hacen otros, al final son métodos similares. Ups. 

Al hablar de alimentos adquiridos en la calle o lugares establecidos, no solamente se trata de comida, también pueden ser bebidas, helados, postres, dulces, y todo lo que se puede comer. Cualquiera de esos lleva su dosis de contaminación. Pero como dije antes, eso ha servido para que nuestro organismo agarre mejores defensas y cada vez sea más difícil enfermarse porque como desde el inicio de nuestra vida, la ausencia de una completa higiene se ha hecho presente, vamos incrementando los famosos anticuerpos, como se les dice coloquialmente, que no son otra cosa que protectores de nuestro cuerpo. Ya solo cuando se sobrepasa la costumbre, es cuando se vuelve a enfermar la gente, pero así se continúa viviendo, salvo desafortunadas excepciones, donde una fuerte infección puede terminar con la vida de alguien. Pero eso es porque se mezcla con otras enfermedades y todo se complica. Por lo general, aquí seguimos, vivos y fortalecidos por la alimentación deficiente y contaminada que diariamente consumimos. 

Eso es lo que en muchos países no se explicaban, ¿Por qué durante la pandemia se asustaban tanto? si la alimentación nacional en general es tan contaminada. Y la verdad, si, fue más el susto que la realidad. Eso fue lo que mató a los que trascendieron y no el invento señalado. 

Además, por qué el mexicano presume de su comida por regiones y en general, incluso criticando a los vecinos de estado, zona o región, por la forma tan insalubre de preparación, si al final de cuentas, todos hacen lo mismo. 

Como dije antes, no es privativo de cierto estrato social, solo que a veces la insalubridad es distinta, pero al final de cuentas, de que curte el organismo del comensal, lo curte. La gran diferencia, es que los puestos callejeros, los que ofrecen los alimentos y cualquier cosa que se coma, están sucios, desaliñados, con ropa que si en verdad fuéramos como presumimos, no se antojaría comer ahí, porque, además de que están sudorosos, huelen mal, visten mal, algunos están jugando la mucosidad en su nariz o garganta, tosiendo, sin las debidas medidas, como el estornudo de “etiqueta” que inventaron durante la pandemia, se rascan cabeza, nariz, cuerpo y algo más, y siguen atendiendo. Grrr. 

En cambio, en lugares fijos, pequeños hasta los más grandes, los empleados están uniformados, eso ya, da más confianza a los comensales, aunque el problema sigue estando en la cocina, aunque pocos logran entrar ahí, pero la preparación deja mucho que desear. Tristemente. Ahí hay ratones, cucarachas, moscas y demás insectos, que algunas veces llegan a aparecer en algún plato de algún comensal, algunos se apenan y no cobran la cuenta, pero la mayoría, son tan cínicos y pobretones que, con todo y eso, la cobran con inquilino indeseado incluido. Así es la vida diaria nacional, donde estamos mal desde el organismo, ¿Qué podemos esperar de la mentalidad?

lunes, 21 de abril de 2025

Casi por desaparecer...

                                                 EL DERECHO Y EL ESTADO. 

El Derecho o conjunto de normas jurídicas se divide en dos grandes grupos de materias, que son: el Derecho Público y el Derecho Privado. El Derecho Público es aquel que se refiere a la organización del Estado (Gobierno, Administración y Tribunal) y a sus relaciones con los particulares; y el Derecho Privado reglamenta las relaciones entre los particulares únicamente. El Derecho Público se divide a su vez en: Derecho Constitucional, Derecho Administrativo, Derecho Internacional Público, Derecho Agrario, Derecho Penal y Derecho Procesal. 

El Derecho Constitucional estudia la Constitución o Ley Fundamental del país, que fija la organización política, las bases sobre las que actúan los poderes públicos y los principios a que deben ajustarse las leyes secundarias. El Derecho Administrativo establece las reglas a las que sujetarán su actuación los diversos órganos del Gobierno. El Derecho Internacional Público estudia las relaciones que tienen entre sí las naciones. El Derecho Agrario reglamenta el régimen de propiedad a que deben sujetarse las tierras del campo. El Derecho Penal reglamenta los actos antisociales que se consideran como delictuosos: los delitos. El Derecho Procesal señala los procedimientos por los cuales se puede llegar a los tribunales para obtener de ellos la protección y justicia. 

El Derecho Privado se divide, a su vez, en: Derecho civil, Derecho Mercantil, Derecho del Trabajo, y Derecho Internacional Privado. El Derecho Civil reglamenta las relaciones entre los particulares, en las cuales no interviene ningún órgano del Estado. El Derecho Mercantil estudia los actos de comercio y las relaciones que de ellos se originan. El Derecho del Trabajo reglamenta las relaciones entre patrones y asalariados, en torno a la contratación y el trabajo. Y el Derecho Internacional Privado trata de resolver los conflictos que se susciten entre particulares, por la aplicación de las leyes de los distintos países. 

Como los conflictos entre particulares o entre éstos y el Estado casi siempre ocurren por la transgresión de las leyes y reglamentos establecidos, por los actos indebidos del Gobierno o las autoridades, o por la negligencia de unos y otros para respetar los derechos privados de alguien, es necesario conocer, aunque sea someramente, las forma en que el Estado Mexicano está organizado y cómo actúa en el ejercicio de sus funciones. La Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos determina que la Nación Mexicana se ha organizado en forma de República Federal, Democrática y Representativa, lo cual significa: 

Que la Nación Mexicana es una República, o sea que se rige por medio de un Gobierno Republicano. La Nación es el conjunto de habitantes de un mismo país o región territorial, que generalmente tienen el mismo origen y hablan la misma lengua, o tienen intereses (tradiciones, costumbres, motivos socio-económico-culturales) largo tiempo comunes. El gobierno republicano es aquel en el cual la más alta representación recae en una persona llamada Presidente de la República, la cual es designada por los ciudadanos mediante elección popular, y dura en su cargo un periodo administrativo de solamente seis años.

La forma de gobierno opuesta a la republicana es la monárquica, en la cual la jefatura del Estado recae en un soberano, llamado rey, emperador, sultán o de cualquier otro modo; pero que generalmente recibe el cargo por herencia de la familia que retiene el poder, y dura en su ejercicio de por vida. En los países más civilizados modernos, que tienen monarquías, éstas ya no son absolutas, sino constitucionales, es decir, que los soberanos están sujetos a leyes que emanan de los pueblos, por lo que muchas ocasiones los reyes tienen pocas facultades de mando.  

La República Mexicana es Federal, porque está dividida en varios Estados (31 y un D.F.), cada uno de los cuales es libre, soberano e independiente en cuanto a su régimen interior, pero se encuentra unido a los demás mediante un pacto que constituye la Federación de Estados, con una ley superior a las estatales o provinciales, que es la Constitución, y un gobierno general para todas las entidades que es el federal. Cada Estado o entidad federativa mexicana, tiene dos gobiernos: uno local o estatal, que se elige dentro del territorio limitado de la entidad federada, y otro nacional, el federal, que se elige por toda la nación. 

Para que ambos gobiernos no se interfieran en el ejercicio de su autoridad y administración, la Constitución nacional establece qué materias de gobierno son federales (de jurisdicción federal), y cuáles son de la competencia de los poderes locales (de jurisdicción estatal). La forma de gobierno, dentro de la republicana, opuesta a la federal, es la República Central, en la que un solo gobierno ejerce su autoridad en todo el territorio nacional y dicta las leyes de todo el país. Ésta forma de gobierno es útil en los países de pequeña extensión. 

La República Mexicana es además Democrática, lo que significa que el gobierno radica, como un poder público, originalmente en el pueblo, del cual los gobernantes no son más que representantes y servidores suyos. El pueblo elige a sus gobernantes y delega en ellos su poder para gobernarse, por lo que el gobernante debe siempre interpretar el sentir popular para gobernar de acuerdo con él; pudiendo el pueblo retirarle su mandato si no se ajusta a tales exigencias. El derrocamiento de los gobiernos tiranos se hace por medio del derecho de rebelión de los pueblos. 

El tipo de gobierno opuesto al democrático es el de la dictadura, gobierno absoluto en el que el mando lo ejerce un individuo o un partido político, sin dejar que otras personas o partidos puedan participar en el gobierno. Las dictaduras políticas son de muchos matices y grados, y pueden ir desde el gobierno despótico y atrabiliario, hasta el simplemente intervencionista, que va absorbiendo poco a poco el manejo de la vida de un pueblo, restando a la iniciativa privada, cada vez más, su legítima intervención en la modelación de la vida colectiva. 

Finalmente, la República Mexicana es Representativa, lo que alude a que tiene un gobierno en el cual las leyes que rigen a la nación, son formuladas por grupos de personas, capacitadas y más o menos especializadas en tales funciones, que representan al pueblo. Ésta representación es la del Poder Legislativo. El Gobierno Mexicano está organizado de acuerdo con la teoría de la División de Poderes, que estima que si la autoridad radica en mayor número de personas, hay una posibilidad mejor de que no se concentre en una sola la totalidad del poder, y que los errores y abusos que se cometan sean menores. 

Como verás amable lector, esto es teoría, letra casi muerta, porque la práctica cotidiana, refleja todo lo contrario. 

domingo, 20 de abril de 2025

Triste realidad nacional...

 

El mexicano corrupto. 

Con el combate reciente al robo de combustible, mejor conocido como huachicoleo, México vuelve a figurar en el escenario mundial como lo que nos distingue desde antes, como un país corrupto, tramposo, pobre de mentalidad, y cualquier adjetivo negativo que te llegue a la mente, estimado lector. 

Como he señalado en anteriores ocasiones, a nadie le gusta escuchar la verdad, y menos a los mexicanos, es un tema que pretenden olvidar, imaginándose como seres inmaculados, extraordinarios, fuera de este mundo, pero la realidad dista de serlo, por tantas acciones que realizamos, que van desde lo que se pretende minimizar, señalando como insignificancias, hasta lo que estamos viviendo estos días, sobre todo en los estados en que se está viviendo el desabasto de combustible, porque no solo es gasolina, aunque es la más usada, y aquí comienzo con ponerle un tache al gobierno federal, porque insisten en llamar de otra forma a la escasez del mismo. Es una práctica muy nacional, el manejar eufemismos para tratar de disfrazar la verdad, la realidad. 

Siguiendo con el análisis de hoy, a nivel mundial, no nos caracterizamos por ser un ejemplo para nadie, al contrario, los extranjeros comunes (ya he dicho que ningún prestador de servicios va a externar su opinión real, porque llevando dinero para gastar, te reciben bien), prefieren darle la vuelta a un nacional y ahora con las imágenes reales o exageradas que aparecen en los medios de comunicación, aunado a las opiniones del presidente y sus subordinados, de los bots (cuentas falsas) del internet, las fake news, los memes de las redes sociales, han colocado al país en una situación de descrédito mayor como Nación. Y en eso la gente que lo hace no se detiene a pensar en el daño que le causa a un país que no termina de salir de su mediocridad, oscuridad y medianía. 

Sé que la gente que no ha tenido la oportunidad de salir al extranjero, duda de mis palabras, aunque los ejemplos aparecen en la televisión, principalmente en los temas deportivos, lo vemos frecuentemente en el futbol, que es el deporte más visto y practicado por los mexicanos. Recientemente hay varios futbolistas en el balompié europeo, pero, por muy buenos (ya he señalado en que consiste que destaquen o no), que se crean que son, pocos, muy pocos, son titulares en sus equipos, los únicos constantes fueron Hugo Sánchez con el Atlético y el Real Madrid y Rafael Márquez con el Mónaco, Barcelona y Hellas Verona, los demás, incluido el mejor jugador de los recientes años, Cuauhtémoc Blanco, no fue titular con el Valladolid, los equipos prefieren jugadores de cualquier otro país, antes que elegir a un mexicano. Esa es una clara señal de la pésima opinión que se proyecta al extranjero. 

Pues bien, retomando el tema a nivel interno, es incomprensible la conducta que mostramos en cualquier situación, y como nadie nos corrige y si nos corrigen nos enojamos, la negatividad de acciones se va incrementando día con día, hasta los niveles en los que estamos como país. 

Dice una máxima, si en tu casa no te educan, la calle te va a educar, pero en la actualidad, ya ni eso sucede, porque con la creación de los derechos de los niños, de las mujeres, de los hombres, de las minorías, de oficinas defensoras de todo, que solo han servido para darle empleo a los recomendados e hijos de los políticos, pero cuando alguien realmente las necesita, no hay la respuesta apropiada, sin embargo, han hecho más daño que progreso al país, en su generalidad. 

Porque ya no se le puede corregir a nadie, ya que de inmediato amenazan a quien lo intenta hacer, con X o Y acción en su contra. Aunque esas oficinas solo emitan recomendaciones que no tienen que ser cumplimentadas y que en realidad así ocurre. Pero como también la tecnología y los medios de comunicación juegan un papel nefasto, apoyando o publicitando videos incompletos, editados solo para que se deje en evidencia a los pocos servidores públicos que realmente cumplen con su deber, esto se ha vuelto una pachanga, donde las minorías tienen dominada a la mayoría que es la que debería tener los privilegios, pero en México, eso es al revés. 

Cualquier sujeto sin estudios ni preparación, tranquilamente puede colocar un puesto en la calle, ocuparla, ocupar la banqueta, que son públicas, pero para usarse para lo que están hechas, ponerse a vender mercancía ilegal, o lo que le venga en gana y ninguna autoridad los mueve, provocando roces y fricciones con la gente normal, porque le estorban su cochera, su banqueta, su negocio, porque un puesto ambulante, da mal aspecto, además, sin el propósito de ofender a nadie, en general, los que los atienden son gente sucia, desaliñada, con mal aspecto, mala facha, dirían nuestros antepasados, claro que hay excepciones, pero son escasas. 

Los alcaldes, síndicos y regidores, solo están su periodo, viviendo bien, gracias al presupuesto público, pero no hacen su trabajo, no cumplen con sus funciones, atribuciones ni obligaciones, solo utilizan su membrete para andarse pavoneando en las reuniones, en las redes sociales, en la calle, rodeados de subalternos que, con la necesidad de tener un empleo, los escoltan, elevándoles el ego, diciéndoles que todo está perfecto, que no hay demandas ciudadanas. Y eso en el extranjero se sabe, porque cualquier rincón del país, por bonito o feo que esté, alguna ocasión es o será visitado por algún turista despistado, o peor aún, engañado, porque hay gente y gustos para todo. 

Pues así como el mexicano es chismoso, mejor dicho, comunicativo para no herir susceptibilidades, los extranjeros también informan a sus amigos y familiares, de lo que encontraron en determinado país y la voz se va corriendo. 

Aunado a los malos tratos que reciben, los engañan, los roban, los timan, los violan, los asesinan, en fin. 

Así de mal estamos, por que desafortunadamente, en lugar de aceptar lo que hacemos mal, preferimos, desde el gobierno y los medios de comunicación, maquillar cifras y conductas, creyendo que se engaña al mundo, pero los únicos engañados somos los mexicanos y eso, también tiene que ver con la corrupción. Y así estimado lector, no se puede salir del ostracismo y la mediocridad.               

sábado, 19 de abril de 2025

Publicación...

 

Marcadas por la vida…

Lic. Alfredo Castañeda Flores     ANALISTA

17 ABRIL 2025.-Lo he dicho y lo vuelvo a hacer, nadie nace malo, las circunstancias, tristemente nos van formando o peor aún, deformando, y lo que hoy comentaré tiene que ver, con la transformación negativa de las mujeres. 

Conozco muchas mujeres de distinta edad que, desde pequeñas, sus propias madres las han arrojado, prácticamente a la calle, esto, porque desde cierta edad, pasados los diez, doce, menos o más años, les dejan de comprar cosas necesarias, ropa, calzado, incluso juguetes, al contrario les exigen dinero para mantener la casa, dejando a un lado los estudios que puedan estar realizando, primaria o secundaria, algunas bachillerato, hacerlo a esas menores de edad, es un descontrol emocional que afecta, sin duda alguna, el resto de sus vidas. Aunque también como lo he señalado en entregas anteriores, también cuenta la mentalidad fuerte de muchas mujeres, pero la mayoría carecen de eso. 

Se diga lo que se diga, las mujeres son peores que los hombres, ellas se ponen exigentes, sin razón alguna, quieren que se haga lo que ellas dicen y no aceptan respuestas contrarias, y en cuanto a echar a perder la vida de los hijos, en este caso, de las hijas, ellas son las responsables, porque no les importa lo que diga el padre, ni lo que llegue a pasar por sus pretensiones económicas. Lo hacen y punto. 

Así que, por eso, muchas niñas, después mujeres, pierden su inocencia con cualquier vago, bueno para nada, porque se sienten devaluadas, vulnerables desde su casa, porque no se le puede llamar hogar, a esos lugares, donde se les exige llevar dinero, cuando no tienen ni la edad ni la preparación para hacerlo. 

Como ven que su propia madre las manda a la calle a conseguir dinero, lo primero que hacen, cuando tienen la mente débil, es encontrarse un novio de su barrio, bajo por supuesto, al que le cuentan sus penas infantiles, él quizás igual de obligado que ella, también se sincera con ella, alcanzan cierto nivel de intimidad que los lleva, como se dice, una cosa lleva a la otra, a tener sexo, ellas por primera vez, ellos, puede ser, pero lo que es verdad, no lo disfrutan, lo que propicia que lo utilicen para obtener beneficios, sobretodo de tipo económico, porque no saben lo que es disfrutar plenamente de su sexualidad, que tuvieron que usarla, por tristeza, por soledad, por ninguna causa, solo porque así pasó, y así va transcurriendo su vida, terminan con un novio, tienen otros y con todos hacen lo mismo, porque piensan que así deben ser las cosas, quizás alguno de sus tantos amantes, si la considera humana y no solo un instrumento de placer, que las hace explotar su sexo, logrando hacerlas tener orgasmos, pero la mayoría nunca en su vida, lo experimentan, ahí están las estadísticas, un alto porcentaje de mujeres mayores, que jamás han sentido el clímax, la cúspide sexual, precisamente porque también los hombres no saben como alcanzarlo. 

Ellos solo se satisfacen, porque es penetrar, moverse y eyacular, eso es simple y sencillo, pero de ahí no pasa, no saben cómo tratar a su compañera, no la saben estimular completamente. Ella necesita otras cosas para hacerlo. Triste realidad nacional. 

Eso provoca innumerables infidelidades de unos y otras, porque erróneamente andan buscando esa satisfacción, pero que pocas, muy pocas veces obtienen, porque hay un reducido número de hombres que se interesan por leer, aprender como tratar a una mujer en la intimidad. La mayoría, no lo hacen, cuando deberían, porque así se disfruta más entre ambos, sea casual o duradera la compañera. 

Pero retomando el tema de hoy, al mandar a las hijas a conseguir dinero, se exponen a diferentes situaciones, porque no toda la gente es buena, de origen si, pero ya está maleada por sus propios padres, familia, y quieren algo a cambio de dar. Aunque sea trabajo. Cuantos casos de mujeres abusadas en los hogares, por trabajar ahí, hemos sabido, porque muchas de esas fámulas, son jóvenes, hermosas, con buen cuerpo, y están desprotegidas, porque desafortunadamente las cosas se saben, entonces, los que hacen eso, ya están enterados de la verdadera situación de la mujer y abusan de ella, otros les ofrecen dinero por sus servicios íntimos, que es lo más frecuente y común, ellas, desesperadas por tener dinero para llevarle a su madre, principalmente, aunque también hay padres que lo hace, pero son los menos, además de que por ser jóvenes, quieren estrenar cosas, en la actualidad quieren un celular nuevo o uno mejor que el que tienen, pero por lo mismo, no les alcanza, entonces cuando ven la oportunidad de obtener más dinero por su sexualidad, sin dudarlo, lo hacen, cayendo en las redes de la nueva prostitución, con otros nombres y modalidades, pero al final de cuentas, eso es. 

Y como dije antes, como perdieron su virginidad sin darse cuenta cómo y con quien, no les importa seguirla usando para obtener beneficios económicos. Porque un rato de una, dos o tres horas, les reditúa lo de una semana o más de trabajo formal, con salario fijo. Por eso es que cada vez más mujeres lo hacen, y no se esclavizan en un empleo fijo. Da tristeza conocer a muchachas así, que aun no tienen la mayoría de edad y su vida sexual ha sido precoz. 

Pero desafortunadamente, tienen mucho que ver las propias madres de ellas, por exigirles dinero que no les corresponde llevar a la casa, ellas no pidieron nacer, una frase trillada pero que se aplica en este caso, casos así hay en todos los rincones del país, pero como somos tan indiferentes, indolentes, no los vemos, pero los hay en la casa de junto, en la de enfrente, a la vuelta de la esquina, en cualquier lugar, que menos nos imaginamos. Basta con observar detenidamente, la vida de los demás, para conocer el verdadero infierno que están viviendo, pero eso, muy pocos lo hacemos, la mayoría, tiene que lidiar sus propios demonios, y no quiere saber de los del de enfrente. Hay que entender y comprender a los demás, desafortunadamente, a veces hacen cosas graves a los demás, pero no es culpa de ellos, sino es por sus circunstancias personales y la gente con la que vivieron que terminan así, siendo denostados por la sociedad, por culpa de los seres que les dieron la vida. Son patrones negativos que se van repitiendo. Pero ninguna ideología partidista de gobierno hace lo necesario para cambiar las cosas. Así es la triste realidad nacional en la que seguimos retrocediendo.

Una duda razonable...

 

¿Cómo son tus pensamientos? 

Quizás sea repetitivo, pero si queremos ser o tener, lo que imaginamos, lo que anhelamos, lo que soñamos, debemos cambiar nuestros hábitos diarios, de lo contrario, seguiremos sumidos en la opacidad, la mediocridad y la pobreza. 

La mayoría de nosotros, amable lector, hemos sido empleados o conocemos a gente que lo es, y fuimos testigos de que la mayoría de esas personas, tienen ideas, pensamientos y acciones mediocres, de pobreza, que para nada influyen en ser exitosos, fuertes, importantes. Que es a lo que muchos aspiran. ¿Cuáles, dirás? 

Es muy común escuchar a las personas decir que un problema llama a otro y que cuando tienen una dificultad caen todas juntas y que por lo tanto cómo van a mantener una actitud optimista ante la vida si parece que esta los mantuviera sumidos en una vorágine de malas noticias. Muchas otras personas se cuestionan cómo progresar, como tener una buena actitud, si su vida los agobia con una tristeza tras otra. Yo más bien pregunto: ¿y es que una mala actitud, una baja energía, un marcado pesimismo, va a ayudarles a salir de la difícil situación en la que se encuentran? Obviamente no. 

La mayoría de las personas se mueren sin saber para qué eran buenos: vegetan en un trabajo, se acomodan a él, incluso, empiezan a tener los comportamientos que anteriormente deploraban. ¿Cuáles? La sonrisa que se repite cada 15 y cada 30/31 del mes, cuando llega el sueldo: odiar los lunes, amar los viernes, concentrarse en cuánto va a ser el incremento del salario para el año entrante, empezar a hablar de temas como la pensión, jubilación, preocuparse por la prima o bonificación periódica, por el FONAC, y otras conductas lamentables. No estoy en contra de los empleados, sino en contra de trabajar en algo que no disfrutes ni concuerde con aquello para lo que viniste a este mundo; con algo con lo que no vibres. No hay reencarnación garantizada, es vital encontrar el para qué vine a este mundo, no solamente por satisfacción personal, sino también como propósito para obtener más ingresos y no depender del gobierno o de algún pariente millonario que no existe. 

Hay otras personas que culpan a la economía del país, si la economía está bien, dicen estar bien, si la economías está mal, por consiguiente, ellos están mal. Eso es falso. Una persona con educación financiera y con un para que claro progresa en épocas de dificultades económicas o de bonanza. Claro que influye, pero no de forma determinante. 

El mayor riesgo es vivir una vida mediocre, por debajo de tus posibilidades y en la que el miedo es protagonista, no tus sueños. 

Hay un dicho extranjero que se aplica perfectamente: la misma agua que endurece un huevo, ablanda una papa. No son las circunstancias las que importan, de lo que se trata es de la actitud con la cual se afrontan y de cómo esta facilita la consecución de las cosas, no solamente materiales, sino espirituales. 

Es un acto verdaderamente irresponsable morir pobres teniéndolo todo para ser ricos y dejando en medio de ríos de lágrimas, sangre y deudas a aquellos que dependen de cada uno de nosotros, poniéndolos a sufrir cuando en vida se les puede haber dado mejores resultados. 

Mientras tú crees que el mundo, la economía o tu país están en crisis, muchos se hacen millonarios con tu pesimismo. 

En ocasiones, y esto es algo muy arraigado en nuestra cultura mexicana, se tiende a creer que las dificultades y las crisis aparecen en nuestras vidas porque Dios lo quiso así y que saldremos de ellas si Dios quiere que así sea. Y como estas frases hay otras que usan muchos cotidianamente que refuerzan esa creencia de que las cosas ocurren por una voluntad que es divina y totalmente ajena a nuestro control. 

Lo que pienso al respecto es que Dios quiere de nosotros ante todo determinación. Dios quiere actitud. Dios quiere que con todo lo que te ha dado, progreses y hagas progresar a muchos más. Él no quiere tanto lamento, ni tanta resignación amañada. Hay una frase que me gusta mucho: reza como si todo dependiera de Dios, pero trabaja como si todo dependiera de ti. Pienso que la actitud ahí también es determinante. No dejárselo todo a Dios o no decir que esto no funcionó porque Dios no lo quiso, no, no, no, ¿dónde está tu perseverancia, dónde está tu actitud, dónde están tu determinación y tenacidad? Recuerda: el universo te toma fotos, si te ve muy determinado, te manda lo que te mereces, califica con más merecimientos. Pero si simplemente estás resignado y mandas mensajes de derrota todo el tiempo, ¿Qué te va a mandar el universo? Lo que estás recibiendo. 

Se trata entonces de no dejar todo a la deriva y esperar a ver qué sucede. Es libre quien toma las riendas de su vida. No el que reza y espera que las cosas cambien por sí mismas y como un milagro. Hay que ayudarse uno mismo y cambiar la mentalidad perezosa y conformista de quien se sienta a ver cómo pasa el tiempo. 

Cuando eres capaz de vencer esa vocecita interior que te limita, que te paraliza, te conviertes en el capitán de tu vida y amo de tu destino. Adelante. 

¿Cómo son tus pensamientos?

Viernes, 01 de Junio de 2018 07:40 Lic. Alfredo Castañeda Flores Noticias - Columnas

Quizás sea repetitivo, pero si queremos ser o tener, lo que imaginamos, lo que anhelamos, lo que soñamos, debemos cambiar nuestros hábitos diarios, de lo contrario, seguiremos sumidos en la opacidad, la mediocridad y la pobreza. 

La mayoría de nosotros, amable lector, hemos sido empleados o conocemos a gente que lo es, y fuimos testigos de que la mayoría de esas personas tienen ideas, pensamientos y acciones mediocres, de pobreza, que para nada influyen en ser exitosos, fuertes, importantes. Que es a lo que muchos aspiran. ¿Cuáles, dirás? 

Es muy común escuchar a las personas decir que un problema llama a otro y que cuando tienen una dificultad caen todas juntas y que por lo tanto cómo van a mantener una actitud optimista ante la vida, si parece que esta los mantuviera sumidos en una vorágine de malas noticias. Muchas otras personas se cuestionan cómo progresar, como tener una buena actitud, si su vida los agobia con una tristeza tras otra. Yo más bien pregunto: ¿y es que una mala actitud, una baja energía, un marcado pesimismo, va a ayudarles a salir de la difícil situación en la que se encuentran? Obviamente, no. 

La mayoría de las personas se mueren sin saber para qué eran buenos: vegetan en un trabajo, se acomodan a él, incluso, empiezan a tener los comportamientos que anteriormente deploraban. ¿Cuáles? La sonrisa que se repite cada 15 y cada 30/31 del mes, cuando llega el sueldo: odiar los lunes, amar los viernes, concentrarse en cuánto va a ser el incremento del salario para el año entrante, empezar a hablar de temas como la pensión, jubilación, preocuparse por la prima o bonificación periódica, por el FONAC, y otras conductas lamentables. No estoy en contra de los empleados, sino en contra de trabajar en algo que no disfrutes ni concuerde con aquello para lo que viniste a este mundo; con algo con lo que no vibres. No hay reencarnación garantizada, es vital encontrar el para qué vine a este mundo, no solamente por satisfacción personal, sino también como propósito para obtener más ingresos y no depender del gobierno o de algún pariente millonario que no existe. 

Hay otras personas que culpan a la economía del país, si la economía está bien, dicen estar bien, si la economías está mal, por consiguiente, ellos están mal. Eso es falso. Una persona con educación financiera y con un para qué claro progresa en épocas de dificultades económicas o de bonanza. Claro que influye, pero no de forma determinante. 

El mayor riesgo es vivir una vida mediocre, por debajo de tus posibilidades y en la que el miedo es protagonista, no tus sueños. 

Hay un dicho extranjero que se aplica perfectamente: la misma agua que endurece un huevo, ablanda una papa. No son las circunstancias las que importan, de lo que se trata es de la actitud con la cual se afrontan y de cómo esta facilita la consecución de las cosas, no solamente materiales, sino espirituales. 

Es un acto verdaderamente irresponsable morir pobres teniéndolo todo para ser ricos y dejando en medio de ríos de lágrimas, sangre y deudas a aquellos que dependen de cada uno de nosotros, poniéndolos a sufrir cuando en vida se les puede haber dado mejores resultados. 

Mientras tú crees que el mundo, la economía o tu país están en crisis, muchos se hacen millonarios con tu pesimismo. 

En ocasiones, y esto es algo muy arraigado en nuestra cultura mexicana, se tiende a creer que las dificultades y las crisis aparecen en nuestras vidas porque Dios lo quiso así y que saldremos de ellas si Dios quiere que así sea. Y como estas frases hay otras que usan muchos cotidianamente que refuerzan esa creencia de que las cosas ocurren por una voluntad que es divina y totalmente ajena a nuestro control. 

Lo que pienso al respecto es que Dios quiere de nosotros ante todo determinación. Dios quiere actitud. Dios quiere que con todo lo que te ha dado, progreses y hagas progresar a muchos más. Él no quiere tanto lamento, ni tanta resignación amañada. Hay una frase que me gusta mucho: reza como si todo dependiera de Dios, pero trabaja como si todo dependiera de ti. Pienso que la actitud ahí también es determinante. No dejárselo todo a Dios o no decir que esto no funcionó porque Dios no lo quiso, no, no, no, ¿dónde está tu perseverancia, dónde está tu actitud, dónde están tu determinación y tenacidad? Recuerda: el universo te toma fotos, si te ve muy determinado, te manda lo que te mereces, califica con más merecimientos. Pero si simplemente estás resignado y mandas mensajes de derrota todo el tiempo, ¿Qué te va a mandar el universo? Lo que estás recibiendo. 

Se trata entonces de no dejar todo a la deriva y esperar a ver qué sucede. Es libre quien toma las riendas de su vida. No el que reza y espera que las cosas cambien por sí mismas y como un milagro. Hay que ayudarse uno mismo y cambiar la mentalidad perezosa y conformista de quien se sienta a ver cómo pasa el tiempo. 

Cuando eres capaz de vencer esa vocecita interior que te limita, que te paraliza, te conviertes en el capitán de tu vida y amo de tu destino. Adelante...

jueves, 17 de abril de 2025

Así las cosas...

 

EL SER HUMANO Y SUS MIEDOS MÁS PROFUNDOS.

Los seres humanos, estamos llenos de miedos, temores, sospechas y un sinnúmero de situaciones que nos frenan, nos detienen y no nos dejan avanzar en la consecución del principal objetivo humano: la felicidad. Para algunos son conocidas como debilidades humanas, son los rasgos de la personalidad que nos llevan a sentirnos afligidos, angustiados, desesperados. Por cada debilidad que nos provoque, de principio sentimos impotencia y ansiedad, normalmente dejamos que nos afecten de forma negativa.

Una de las debilidades humanas que más nos intranquilizan constantemente es el miedo. Miedo a quedarse solo, a las enfermedades, a la muerte, miedo a la pobreza, a lo desconocido, a la muerte propia o de algún familiar, miedo a ser traicionado, al fracaso, a sentirnos frustrados, miedo al ridículo, a la mediocridad, miedo a volver a lo mismo después de haber conocido el infierno y estar después en el lado opuesto, en fin, se tiene miedo a todo, por supuesto que en mayor o menor medida, pero siempre está presente y latente el miedo, porque incluso hasta el estrés es considerado una modalidad del miedo.

Haciendo un análisis concienzudo en la sociedad se pueden reconocer algunas de las debilidades humanas, como el resentimiento, la envidia, la cólera, el dinero, el poder, el prestigio, los celos, el sexo, la vanidad, y sobre todo, el ser muy selectivo; el alcoholismo y la drogadicción, así como toda la amplia variedad de conductas compulsivas son también debilidades humanas.

Físicamente las debilidades humanas más exigentes son: la necesidad de comer y beber, de dormir o de tener relaciones sexuales. Existen otras como el frío, el calor, o en general, la necesidad de vivir con la capacidad de protegernos eficientemente del medio ambiente y el clima.

Las debilidades humanas con relación a la mente, las reconocemos cuando continuamos insistiendo en tener ideas o pensamientos fundamentales para satisfacer sobre todo, muchos de nuestros deseos personales irracionales.

En el ámbito espiritual, las debilidades humanas se manifiestan cuando nos oponemos conscientemente a aceptar o realizar la Voluntad de Dios. Cuando eres creyente, pero no aplicas en tu diario vivir, las enseñanzas teológicas.

Identificar nuestras debilidades humanas nos permite trabajar objetivamente, evitando así realizar esfuerzos inútiles para mejorar nuestra personalidad.

Las debilidades humanas siempre nos impiden y han impedido tomar decisiones maduras, hasta hoy han sido la causa de la mediocridad y cobardía personal, o incluso de grupos. Desafortunadamente, los jóvenes de la actualidad, no quieren usar su cerebro para lo más elemental, y así no se puede alcanzar una madurez satisfactoria. Esto es personal y depende de cada uno.

Si no perseveramos para prevenir el miedo y lo que este conlleva, jamás mantendremos la serenidad lo suficiente para estar en condiciones de reconocernos como seres humanos con una real necesidad de fortalecer nuestras áreas física, mental y espiritual para no continuar insistiendo en satisfacer las exigencias desmedidas de estas propias debilidades.

Modificar, paulatinamente el miedo, evitará que todo el esfuerzo que hemos realizado hasta el momento para conocernos y fortalecernos haya sido en vano. Ya no se debe permitir que nuestras debilidades humanas sigan haciendo de nosotros personas mediocres y cobardes. Se necesita valor para enfrentarnos a nuestros enemigos, pero se necesita de más valor para enfrentarnos a nuestros amigos. Pero sólo una mente fuerte es capaz de dominarse asimismo. 

miércoles, 16 de abril de 2025

No lo permitas...

 

¿Amistad entre los EX? 

Un tema controvertido, que se da de manera frecuente en cada rincón del país, para algunos es normal, para otros no, sin embargo existe. 

Mayoritariamente, se sabe que no existe una verdadera amistad, entre un hombre y una mujer, pero muchos así lo creen. 

Cuando un hombre busca a una mujer, con el pretexto solo de amistad, se está engañando o su orientación sexual es otra, pero de que hay un interés distinto lo hay. Si se es heterosexual, obviamente lo que busca es amor, pasión, sexo o todo junto, salvo las honrosas excepciones. 

Y por el lado contrario, es lo mismo, la mujer busca eso, pero recientemente, lo que más busca es dinero y se entrega con facilidad para obtenerlo. 

Muchas relaciones terminan desde el noviazgo, lo cual ocurre con enorme facilidad, y algunos dicen terminar como amigos, lo cual resulta falso. Porque normalmente, el noviazgo termina por culpa de uno de los dos que forman la pareja, además en esa edad en la que está la inmadurez de los dos, es comprensible que terminen rechazándose y se acaba la “amistad”, o con el paso de los días, cuando uno o ambos ya tienen una nueva relación, poco a poco se van olvidando de la persona que decían “amar” tanto. 

Si se llega a lo máximo, que es el matrimonio, si hay amor del bueno, como dicen los poetas, por supuesto que esa relación, sigue por varios años, incluso hasta la muerte de uno o ambos de los interesados. Pero no necesariamente es amistad. 

Por otro lado, están los que protagonizan este análisis. En la actualidad, los pocos que se casan, terminan rápidamente divorciados, por cualquier pretexto, pero si hay hijos, esa relación seguirá por el resto de sus vidas, lo mismo ocurre con los que solo se van a vivir juntos, sin ningún vínculo legal que los ate, aunque para esos casos, es más fácil, separarse. 

Así es amable lector, sicológicamente, no es sano, mucho menos recomendable, terminar siendo “amigos” de los EX, porque es mantenerse en un círculo vicioso que puede afectar a uno o a ambos, porque pueden perderse oportunidades, por seguir, en una relación amistosa con una ex pareja que muchos del círculo social de él o ella, saben que hubo y los posibles pretendientes, no se atreven a presentarse, además de que se dan cuenta hasta dónde llega esa “relación”. 

Hay casos, en los que hubo noviazgos en la etapa estudiantil, donde hubo relaciones sexuales, y que por determinado motivo o causa, terminaron separados, y aunque no se juntaron o casaron, y cada uno tiene su pareja, siguen teniendo sesiones de sexo, de manera frecuente, ahora los engañados no son uno o dos, sino cuatro. Incluso hasta se dan casos que alguno de los hijos, no sea de la pareja que las mantiene, sino del amante que conservan desde su juventud.

Cuando, ya tuvieron más intensa esa relación, sea por matrimonio o unión libre y haya o no hijos, también hay muchos que aun con otra pareja uno o ambos, mantienen esa cercanía que provoca la sexualidad, peor aún, cuando hay hijos, porque la mujer con tal de conseguir dinero o más de lo que le ofrecen, entrega su cuerpo a su ex, cada vez que se hablan por teléfono, quedando de verse en determinado lugar, que un alto porcentaje de esas reuniones terminan en sexo, como el vínculo que los une es familiar, con esa facilidad engañan a sus parejas actuales, además de que hay casos, en los que la pareja masculina actual, no las satisface, no las prende, no las llena, las mismas mujeres, son las que buscan a su ex para reavivar la llama que alguna vez los unió. 

Parece fantasía, ¿verdad?, pero es más común, de lo que te imaginas inteligente lector, sobretodo, porque ambos ya se conocen de tiempo atrás, incluso algunos hasta perdieron su virginidad juntos, saben qué les gusta en la intimidad, qué los enciende, qué necesitan, incluso hasta con qué frecuencia requiere ella, actividad sexual, además la pequeña gran diferencia entre vivir con otra pareja y buscar a la anterior, es lo que genera cualquier amante, solo se ven unas cuantas horas y específicamente para tener sexo, no tienen que convivir la mayor parte del tiempo, no tienen que discutir por nimiedades o problemas reales, no tienen que atender a los hijos, a la pareja, no tienen que hacer comida, lavar la ropa, limpiar o atender la casa, simple y sencillamente, tanto el hombre como la mujer, solo tienen un rato de placer, sin nada que los haga discutir o los haga enojar, como la pareja cotidiana. 

Por supuesto, que esas acciones, son un pretexto, de mentes débiles, esas que a todo le buscan para ocultar sus errores, porque hay parejas que terminaron mal y jamás se volvieron a buscar, aun cuando haya hijos de por medio, pero ten cuidado si tu pareja actual, continúa una “amistad” con alguno de sus EX, porque eso no es así de simple, hay algo más fuerte que una plática “inocente” de vez en cuando, aun cuando haya hijos entre ellos. Si un hombre acepta como pareja o esposa a una mujer con hijos de otro, sabe que tiene la responsabilidad de mantenerlos a todos, de lo contrario, tarde o temprano le será infiel con su EX. ¡Ponte atento!