Estadísticas y encuestas políticas.
Estamos
en el preámbulo de un año electoral, donde habrá elecciones federales y
locales, varias entidades federativas han modificado sus elecciones locales
para evitar duplicidad de gasto (¿?), acomodándolas con las federales; en el
2018, habrá en disputa, además de la Presidencia de la República, 128 senadores
y 500 diputados federales; 9 gubernaturas, diputaciones locales y alcaldías,
entre ellas por primera vez, bajo este nombre, las actuales 16 delegaciones del
nuevo estado, el número treinta y dos, la Ciudad de México (CDMX).
Algo
que da empleo, remuneraciones a mucha gente, pero sobretodo, vida a los
políticos, son las casas encuestadoras, de análisis y/o marketing político, las
hay de diferente nivel de impacto, y de distinto precio. Las hay, de apariencia
seria, regulares y las llamadas patito, pero recientemente, todas han resultado
falsas, alteradas o con poca credibilidad, lo importante es el negocio, para lo
cual, ya están etiquetadas, marcadas para que partido o ideología juegan, para
quien las realizan.
Al
decir, que han resultado falsas, es porque todas tienen a diferente triunfador,
hasta al más pequeño representante del partido político más nuevo, sin
simpatizantes, si tiene recursos financieros para la campaña, en alguna
encuesta resultará ganador. Así es el juego político mexicano (y en el mundo,
pero como siempre, me concentro en nuestro país).
Esto,
tiene que ver con los vaivenes de partidos, ¿recuerdan el resultado final de la
elección presidencial de 2012? Participaron 4 candidatos y 7 partidos, Enrique
Peña Nieto, de la coalición PRI-PVEM, Andrés Manuel López Obrador, de la
Coalición PRD, PT, PMC, Josefina Vázquez Mota, del PAN y Gabriel Quadri de la
Torre, del PANAL. Para los que lo ignoran, Morena, no existía como partido.
Ese
fue el resultado final, el PAN que gobernaba, pasó hasta el tercer lugar y los
analistas, daban por muerto durante dos e incluso tres sexenios a dicho
instituto político, pero, gran sorpresa, en las elecciones locales de 2016, en
coalición con el PRD, obtuvo importantes triunfos, gobernando actualmente más
estados que durante los doce años que fue gobierno federal. Ahora el PRI, que
es gobierno, aparece en las encuestas, sondeos y opiniones, hasta el tercer
lugar, los que antes se beneficiaron, principalmente, se enriquecieron al amparo de sus gobiernos, tomaron distancia
del otrora poderoso partido, introduciéndose en los que aparecen mejor
posicionados (PAN y MORENA).
Así
se mueven los aires políticos mexicanos, sin embargo, es cierto que
actualmente, en todas, o casi todas, las encuestas y sondeos, el famoso Peje,
dirigente y dueño de MORENA, aparece como puntero, pero también es cierto, que
los otros partidos, no tienen definido aún a su candidato. La izquierda y derecha
nacional, coquetean para ir aliados y cada partido tienen 3, 4 o más posibles
suspirantes con posibilidades de convertirse en candidato. El PAN a su
dirigente nacional Ricardo Anaya, a Margarita Zavala Gómez del Campo, esposa
del ex presidente de la República, Felipe Calderón Hinojosa, Rafael Moreno
Valle, ex gobernador de Puebla y recientemente se ha unido al selecto grupo,
sin muchas probabilidades, Luis Ernesto Derbez, ex secretario de Estado con
Vicente Fox Quezada. Por otro lado, en el PRD se ubica al último jefe de
gobierno del D. F. Miguel Ángel Mancera Espinosa, sin militancia en el sol
azteca, pero ocupando esa posición por dicho partido, además de ser pareja
sentimental de la dirigente nacional, Alejandra Barrales, Graco Ramírez,
gobernador de Morelos, Silvano Aureoles Conejo, gobernador de Michoacán. Así
que de esta mezcla del agua y el aceite, quedarán muchos inconformes.
Lo
mismo sucede en el PRI, en su reciente asamblea nacional del fin de semana, se
quitaron varios candados internos, para, según los analistas, beneficiar a
varios secretarios de Estado, que no son militantes tricolores: José Antonio
Meade Kuribreña, de la SHCP; Aurelio Nuño Mayer, de la SEP; José Narro Robles,
de la SS; junto al candidato natural, Miguel Ángel Osorio Chong, de la SEGOB y
la ex gobernadora de Yucatán, Ivonne Ortega Pacheco, quien recientemente
levantó la mano.
Así
que una vez definidos los candidatos, las encuestas cambiarán radicalmente, y
como muchos coinciden, el principal enemigo de López Obrador, es él mismo,
porque conforme avanza la campaña política, va sacando su radicalismo y
dijeran, su verdadera personalidad, por lo que aunque las encuestas lo tienen
en la cima, es solo un juego para la ciudadanía, y al final, terminará
perdiendo como en las dos anteriores ocasiones (2006 y 2012), total, para eso
existen las encuestas, para manipular a la ciudadanía, haciéndolos creer en
falsos profetas e inflando candidatos a conveniencia del SISTEMA político
mexicano.
Es
en base a estas, como disfrazan las concerta-cesiones y negociaciones entre las
distintas fuerzas partidistas, haciendo crecer y decrecer a los partidos
políticos según convengan los intereses de la cúpula que nos gobierna, aunque
la ciudadanía, no encuentre alguna explicación. Por otra parte, el surgimiento
de las candidaturas independientes, solo es, para darles protagonismo a los que
nunca han tenido una oportunidad de figurar en los partidos políticos
tradicionales, sin posibilidades de alcanzar el triunfo, ya que los pocos que
hasta el momento lo han logrado, ocuparon con antelación, algún puesto de
elección popular dentro de un partido político.
Así
es amable lector, las encuestas, estadísticas, sondeos y estudios de opinión
que se realizan en las campañas políticas, son caros y pocas, muy pocas veces,
reflejan la realidad de una contienda política, aplican la filosofía popular
de, el que paga, manda y es el que resulta favorecido. Porque forman parte de
un jugoso y bien remunerado negocio, por eso cada vez existen más. O acaso ¿Crees
en lo contrario?