Sexo anal femenino.

Por lo general, cuando escuchamos hablar de sexo anal inmediatamente lo relacionamos con prácticas exclusivamente homosexuales. Esto se ve reflejado incluso en la ciencia, en donde podemos observar que la mayoría de los estudios en sexología han abarcado este comportamiento en este tipo de población ¹ ¿Pero, qué hay de las mujeres?

Bueno, la ciencia nos dice varias cosas al respecto. En primer lugar, varios estudios realizados en diversos lugares del mundo ^{2, 3, 4} nos señalan que una gran cantidad de mujeres han tenido o tienen de manera regular sexo anal. Por ejemplo, en un estudio realizado en Croacia se encontró que dos tercios de las más de 2000 mujeres encuestadas lo habían practicado ⁵.

 

Esto nos hace pensar que pese al tabú que hay respecto al tema, cada vez más mujeres se están aventurando a probar este tipo de práctica sexual… Pero, y ¿por qué? Pues un estudio realizado en población latinoamericana y del caribe ⁶ encontró que: 1) el 56.2% de las mujeres encuestadas indicaban que tenían sexo anal para complacer las peticiones de su pareja, 2) el 20.6 % lo hacía por curiosidad, 3) el 16.5% por placer 4), el 3.6% por no perder su virginidad, 5) y por último el 3.1%, por tener relaciones sexuales sin riesgo de embarazo. Otro hallazgo del estudio fue que más de la mitad de las encuestadas reportaban que la decisión de tener sexo anal era siempre (64.5%) o casi siempre (14.6 %) de su pareja.

 

Por otro lado, se ha encontrado que uno de los principales causantes del aumento en la prevalencia de este tipo de comportamientos es la pornografía, ya que ha roto prejuicios al mostrar el sexo anal, no solo como un repertorio normal en la sexualidad heterosexual, sino como una de las prácticas predilectas tanto de hombres como de mujeres⁷. Probablemente sea cierto que la pornografía aumente la probabilidad de que imitando, tengamos sexo anal. Pero hay diferencias entre lo que pasa en las películas y lo que pasa en la realidad. Así que quisimos indagar: ¿cómo es realmente la experiencia del sexo anal para las mujeres? ¿Será que realmente nos gusta? ¿Realmente el dolor nos impide la excitación? Pues bueno, en una investigación⁵ se encontró que la mayoría de las mujeres realizan su primer coito anal con un compañero estable, y un poco más de la mitad no usaban lubricación en la primera experiencia. Asimismo, cerca de la mitad de las encuestadas reportaban que la primera experiencia fue tan dolorosa que pidieron a sus compañeros detenerse, esto, en contraste con un poco más de un tercio de las mujeres quienes señalaron que no hubo ningún tipo de dolor y que incluso su experiencia fue sumamente placentera. También es interesante ver que las mujeres que no planearon el encuentro tenían menos signos de dolor, esto podría implicar que la predisposición a la situación puede aumentar la percepción de dolor. Además, se encontró que la mayoría de las mujeres que practicaron el sexo anal por segunda vez lograron disfrutarlo mucho más que la primera. También se encontró en un estudio en adolescentes Colombianos⁸ que tan solo el 3,8% de los encuestados utilizan condón sistemáticamente al tener sexo anal.