lunes, 20 de octubre de 2025

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Traición y placer…

Lic. Alfredo Castañeda Flores      ANALISTA

19 OCT. 2025.-Esta es la historia de un ingeniero brillante que culminó su carrera con honores, posteriormente se casó con una mujer vecina suya desde que eran niños, procrearon una hija, su actividad profesional fue en ascenso, primero comenzó de segundón en una firma de ingenieros, ahí aprendió casi todo lo relacionado esa profesión. 

Una vez que juntó un capital se independizó y comenzó a navegar solo por ese mundo laboral, se especializó en la construcción de grandes obras, como su trabajo era recomendable, pronto se hizo de una gran cartera de empresarios, deseosos de invertir en nuevas construcciones, así fue escalando en lo laboral, lo económico y lo social, ya que se codeaba con los grandes, dejando atrás y por debajo a la firma en la que aprendió el arte de los planos, ladrillos y cemento. 

Llegó un momento que, debido a su posición, tuvo que buscar un escolta-chofer que lo acompañara a todos lados, donde su trabajo lo requiriera, más no era necesario para cuidar a su familia. Porque el acompañante era para no agotarse manejando de un lado para otro, debido a la gran cantidad de construcciones que llegaba a tener en ocasiones, ya que eso es desgastante. No por presunción ni mucho menos. 

Así fue pasando el tiempo, ya nuestro personaje pasa el cuarto piso en edad y, junto a sus socios, lograron sellar un proyecto grande, que consistía en la construcción de tres hoteles juntos en la playa, con varios niveles cada uno de ellos. Por lo que previamente a la aceptación y cierre, se reunían en su casa, en un espacio que acondicionó como estudio-oficina, su esposa, conoció aun mejor a los socios-amigos de su esposo, porque ya las reuniones eran más frecuentes y tardadas, analizando los pormenores, riesgos y amenazas de lo que tenían en puerta. Así como las ventajas que eso conllevaba. 

Una vez sellado el proyecto se tuvo que instalar en el lugar donde se realizaría, ahí consiguió en renta una casa donde vivía con su asistente-chofer-amigo. Desde ese sitio hacia las labores de escritorio y posteriormente salía a campo para inspeccionar a los empleados y los avances de la construcción de tan magna obra. 

Como no tenía un espacio fijo para comer, porque lo podía y hacía en donde le diera hambre, un día se les ocurrió comer en una especie de palapa instalada en una zona de la playa, cercana a donde trabajaba. Ese lugar era atendido por una familia, es decir, el papá y sus dos hijas, las cuales eran jóvenes y hermosas, en especial la mayor, lo que no pasó desapercibido por nuestro personaje, que de inmediato quedó prendado a su belleza. Ella, como es común, también, por que era distinto a los demás, porque vestía ropa fina, cara, y vio la oportunidad de salir de su mundo en el que vivía y había crecido. Empezó el flirteo entre ambos, su amigo, le decía, recuerda que estás casado y en la ciudad te espera tu esposa e hija, él, le no hizo caso, intercambiaron números de teléfono, comenzaron una amistad, que fue transformándose en otra cosa más íntima. Ella, como siempre pasa, tenía un pretendiente que la molestaba, y tampoco andaba solo, ya que su ocupación no era tan legal, por lo que en una ocasión se encontraron y se hicieron de palabras, llegando a los golpes, donde la riña no fue leal, porque al principio comenzó entre dos, pero como el Inge, estaba dominando al otro, su acompañante se metió y le dieron tremenda golpiza. Frente a su amada, quien solo lloraba y gritaba, pero no pudo hacer nada más. 

Al mismo tiempo, en la ciudad donde vivía su familia, el socio mayoritario, el que aportaba más dinero para el proyecto, constantemente buscaba y perseguía a la esposa, y en una ocasión, la encontró sola, en una calle desolada, y comenzó a decirle que quería todo con ella, que iba a disfrutar mucho, ella, quizás estaba deseosa de amor, no necesitó mucho y rápidamente se subió a la camioneta de él y se enfilaron rumbo a un hotel de buen nivel, ya que el susodicho tenía estatus y dinero. Ahí dieron rienda suelta a sus instintos y bajas pasiones reprimidas. Eso fue ocurriendo de manera más frecuente, al grado de que el la iba a buscar a su propia casa, sin importarle que estuviera o no la hija de unos diez años de edad. Ella, parecía que le encantaba porque no oponía ninguna resistencia, hasta se notaba que lo estaba esperando a cualquier hora, para darse mutuo amor y entregarse a la lujuria y pasión de unos adolescentes. El matrimonio, sin darse cuenta, estaban haciendo lo mismo. 

Mientras tanto, el individuo enamorado de la jovencita, en una noche, premeditadamente, mandó quemar las instalaciones del puesto de comida, fue pérdida total, y posteriormente, como sucede de forma frecuente, a los tres o cinco días se presentó en la casa de sus padres, estando ambos y su hermana menor, ofreciéndoles cualquier cantidad de dinero para que se levantaran de las cenizas. El papá con la mirada sugerente de la esposa, lo aceptó con la promesa de que se lo pagaría en cuanto pudiera, pero el sujeto tenía otros planes. Al mismo tiempo, mandó a uno de sus hombres a la ciudad a investigar la vida del ingeniero, yéndole excelentemente, porque no solo se dieron cuenta que estaba casado, sino que descubrió que la esposa le era infiel con su socio mayoritario. Le entregó, su enviado, fotos para documentar lo encontrado. 

En la playa, el futuro suegro de nuestro actor, levantó un negocio más grande y hasta contrató personal para que les ayudara, y efectivamente, le iba mucho mejor, cada día tenía más clientela, así le fue juntando dinero al prestamista, y en una ocasión que lo fue a buscar para pagarle la mayor parte de lo recibido, el tipo, le dijo que no necesitaba el dinero, que quería casarse con su hija mayor, el hombre, acostumbrado a la pobreza, aceptó la idea, porque sabía que ahí tendría dinero a manos llenas, la ambición de una mente pobre, apareció en ese instante. Así lo acordaron, sin antes advertirle que el ingeniero la pretendía, que la alejara de él, y el único remedio que se le ocurrió al papá fue encerrarla en su casa, dejándola al cuidado de la madre que, por cierto, jamás los apoyaba en el negocio, típica mujer esperanzada a vivir del trabajo de los demás, como un parásito sin hacer nada. 

Así transcurrieron unos días, cuando la joven se pudo escapar para buscar su amado, y curiosamente, él también había investigado su domicilio, se encontraron los tres dos cuadras antes de llegar, (ella, el ingeniero y su chofer), una vez que se vieron, comenzaron a abrazarse y besarse, después de días sin hacerlo, ni saber nada uno de la otra, cuando va pasando por ahí, el tercero en discordia, acompañado de uno de sus hombres, se bajan de la camioneta y los encaran, aplaudiéndoles, qué hermosa escena, y a la mujer le dice que su gran amor está casado y le muestra una foto de la esposa y su hija, ésta rompe en llanto y se regresa corriendo a su hogar, sin detenerse a escuchar alguna explicación del Inge. Una vez que se quedan los cuatro hombres solos, lo increpa y reclama por qué anda metiéndose en su vida, a lo que de inmediato le suelta, que tiene abandonada a su mujer y familia que se debería cuidar, insinuándole principalmente en el plano sexual, a lo que le dice que eras calumnias que su esposa era decente y honesta, por que de inmediato le muestra una serie de fotografías comprometedoras con su socio. Éste de inmediato, sin decir nada más, le hace señas a su chofer y se encaminan a su casa familiar. Unas horas después llegan, entra como lo hace el dueño y encuentra en la sala de su casa, una escena clásica del cine porno, lo primero que hace es tomar de la cintura de su escolta, la pistola y de inmediato los encaño, ellos se quedan atónitos de la sorpresa, y la esposa suelta la típica frase, no es lo que parece, ajá. Si estaban ambos encuerados y con una cosa dentro de la otra. 

Comienzan los reclamos, de la parte ofendida, en ese momento, hacia la pareja y el socio, no saben cómo solucionarlo, el escolta diciéndole que le entregara la pistola porque se podía comprometer, el otro necio, por momentos apuntando a la mujer, otros al hombre, en un descuido el socio se abalanza sobre la mano que sostenía el arma, comienzan a forcejear como es costumbre, hasta que suena un disparo y cae el socio, en medio de la sangre de la herida, de inmediato salen corriendo, la mujer ahí se queda estupefacta. Llegan hasta la playa, sin importar lo ocurrido, se dirigen a la casa de su amada, le cuenta que se va a divorciar, que la ama, que se casará con ella, ella enamorada y deseosa de salir de la pobreza toma sus cosas, se van, pero antes, pasan a inspeccionar el avance de la obra, estando en la playa, quitados de la pena, sin importar que había dejado un muerto en otra ciudad, oyen una voz femenina a sus espaldas, era su esposa encañonando la pistola que por las prisas, habían dejado tirada, y sin decir nada más le suelta tres disparos que terminaron con su vida. Hoy dos mujeres sufren por esa muerte, una encerrada en una cárcel pagando su crimen, la otra por esa “viudez” impuesta que no llegó a legalmente a consumarse. Es tan real la frase trillada de que la vida real supera a la ficción, porque esto pareciera un extracto de una película, pero solamente es la realidad. Y cuyas historias similares o distintas, desconocemos porque vivimos en un país donde no pasa nada. Ups.

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