...El castigo.
"La idea de la venganza y el castigo infantil es un día de sueño. Hablando con propiedad, no hay tal cosa como la venganza. La venganza es un acto que quieren cometer cuando se ven impotentes y ya que usted es impotente: tan pronto como el sentimiento de impotencia se elimina, el deseo se evapora también"
El niño que muestra una conducta indeseada y es castigado por ello es un niño incomprendido, detrás de cada berrinche o mala conducta siempre hay una razón, ellos también tienen un mal día, pero la diferencia contigo es que él la única manera que conoce es a través de portarse mal, créeme no es personal, no amaneció con ganas de arruinarte el día, solo es un ser humano con sentimientos y necesidades.
Si tú, a tu edad reaccionas ante la mínima provocación con gritos, golpes o berrinches, dime ¿Cómo pretendes que tus hijos no lo hagan?, absurdo e incongruente ¿No crees?
Cuidado: los modales se adquieren por imitación ¿a quién está imitando tu hijo? A la persona con la que pasa más tiempo y se identifica más.
El castigo envilece, humilla y genera fantasías de venganza, tal vez el castigo funcione en apariencias pero el costo es muy elevado, ya que solo genera resentimiento y temor.
¿Porqué seguir castigando?
De verdad te garantizo que ya no funciona o mejor dicho jamás funciona, solo generar doble moral e hipocresía para evadirlos, eliminan la responsabilidad y generan culpas.
No me digas que después de haberlo castigado no te sientes mal, no te genera remordimiento como producto de las culpas. "Los castigos no redimen, tan solo hieren".
¿Cómo lo corrijo?
Regula tus propias emociones: no respondas de forma impulsiva, crea en tu hijo un ser que sepa equilibrar sus emociones, un ser emocionalmente muy inteligente. Entre más relajados estén los dos, más capacidad de razonamiento.
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