...

Ahora, cada vez que añadas una letra o una palabra, aparecerá de color azul y subrayada en el mismo color. Si suprimes, el texto no desaparece, sino que se mantiene en su sitio, eso sí, de color rojo y tachado (cualquiera que haya ido al colegio sabe lo que significa tachado y en rojo). Si cambias una palabra de redonda a cursiva o a negrita, te aparecerá de otro color, preferentemente en verde. También te resaltará en otros colores el párrafo que muevas o las celdas de una tabla que cambies de lugar. Puedes elegir este sistema de llamadas o el de globos: una imitación a la marca que se haría manualmente desde el error hasta una llamada circular o en forma de globo en el margen del documento. 

Te aseguro que es más fácil y más claro el sistema de llamadas de colores.

Ahora, quien vea tu documento podrá ver con claridad dónde están tus cambios.

¿Cuál es la gran ventaja de este sistema? Que los cambios ya se han introducido. En el papel se puede indicar donde está el error y cuál es su corrección para que un maquetador o un editor de mesa lo acepten e introduzcan el cambio: una pérdida de tiempo innecesaria para los documentos que se editan en un procesador de textos.

Si tu tarea es precisamente aceptar o rechazar estos cambios porque estás supervisando tu traducción, tu artículo o las correcciones de otro corrector, tu tarea es mucho más simple: basta con que recorras el documento poniendo tu atención en los textos que presenten un cambio de color. La mayoría de los cambios que te encuentres serán acertados, por lo que no será necesario que tomes ninguna decisión en ese momento, déjalos hasta que llegues al final de documento. Solo cuando te encuentres con los que no estás de acuerdo deberás pulsar el botón rechazar. De este modo, cuando termines solo te quedarán resaltados los cambios que podrás aceptar, todos a las vez, pulsando el botón aceptar todos.

El mundo PDF o el pensamiento analógico en el mundo digital.

Se puede corregir en PDF casi del mismo modo que se corrige en Word. Algunos usan el sistema de añadir comentarios al estilo post it, pero es una pérdida de tiempo, ya que es más fácil añadir o suprimir palabras con el teclado que andar paseando con el botón para añadir notas amarillas que luego alguien tendrá que ir abriendo y cerrando.

La corrección en PDF solo es útil cuando se trabaja sobre unas pruebas de un documento compuesto en un programas de diseño o composición como illustrator o Indesign; es decir, se espera que el documento ya haya sido corregido antes, cuando estaba en un formato editable en un procesador de textos. De este modo, la mayoría de las erratas ya habrán desaparecido cuando se revisen las pruebas de maquetación.

La ventaja principal de corregir en PDF frente al papel es que se ahorran los costes y t5iempos de impresión, envío y devolución; casi nada: puede suponer hasta un ahorro limpio de dos días completos.

La aparición y multiplicación de las tabletas ha abaratado su coste, lo que ha facilitado su compra a la mayoría de los profesionales. Pero esa evolución digital no se ha desprendido de su uso analógico: se vuelve a corregir a mano, con un Stilus o con la punta del dedo, sobre la pantalla de las tabletas.

Los PDF vuelven a quedar pintarrajeados con el secular sistema de llamadas y marcas, porque se puede volver a corregir tan rápido como lo hacíamos con nuestro bolígrafo rojo. Pero no hay que dejar llevarse por la aplicación de nuestro pensamiento analógico en un proceso digital, ya que nos perderíamos las ventajas que tiene el trabajo profesional con un PDF: un sistema de control de cambios más claro, las posibilidades para buscar un término en este y documentos similares, o hasta añadir un comentario de viva voz en nuestro PDF. Volver a corregir como si fuera papel no es un sueño ni, mucho menos, un triunfo.

Lo que se esconde tras el teclado: Unicode
No ter voy a dar la charla sobre lo que significa el consorcio Unicode: hazte a la idea de que son quienes rigen los destinos de los símbolos, códigos, números y toda clase de chirimbolitos que ves en la pantalla. Pregúntale a google y descubrirás un mundo. Vamos a ver para qué te sirve. En ocasiones te habrás encontrado con que necesitas insertar nuestras comillas [""] (si dices tres veces comillas latinas, Jorge de Buen se te aparecerá y hará un sangría ven el primer párrafo). Habrás comprobado que esas comillas no están en tu teclado. Pensarás que la solución es usar la función insertar símbolo: parea casos puntuales, no está mal, pero en el fondo, para si8gnos y símbolos cotidianos, es volver a la velocidad de trabajo cuando se componía con tipos móviles, ve incluso entonces se movían más rápido en su chibalete que nosotros en nuestra selección de símbolos.