Yo soy.

En el nombre de mi amada presencia de Dios yo soy, y la de toda la humanidad, te invoco, para que mantengan encendida la llama de la ascensión a través de mis sentimientos, mi mente, mi cuerpo etérico, mi cuerpo físico, mi hogar, mi negocio y todos mis asuntos. Que su actividad estimulante eleve todo mi mundo al amor, felicidad, opulencia, victoria y perfección de toda especie, eternamente sostenida. Llévame a la victorias de mi ascensión cuando mi servicio aquí en la tierra esté cumplido. Mantengan encendida la llama de la ascensión a través del mundo de los negocios, las mentes, sentimientos de cada vida evolucionando en el planeta tierra para que llegue más rápidamente a la perfección. Les doy gracias.

Amadísima presencia de Dios yo soy en mí, consagro mi vida este día al servicio de Dios -el bien- para que sólo la perfección tome forma en mi cerebro. Que mis sentimientos se mantengan en calma, amorosos, bondadosos, dispuestos a la ayuda y felices. Que mis ojos no vean sino perfección. que mis oídos no escuchen sino perfección. Que mis labios no hablen sino perfección. Que mis manos no hagan sino sanar y bendecir. Que mis pies sean mensajeros del bien. que mi cuerpo sea fuerte y dispuesto a ser un instrumento que lleve a todas partes la perfección de Dios.

Si un individuo que está buscando divinidad, salud, felicidad y suministro pudiera comprender primero el poder de la atención sostenida, y luego por su esfuerzo consciente retira su atención de aquellos muchos imanes del mundo de las apariencias, anclando su atención en la presencia de Dios, esa presencia fluirá a trasvés de él en la corriente que regresa, con plenitud de todo lo que él puede desear. Se ha repetido con insistencia: Allí donde estás tu atención, en eso te conviertes. La radiación del amor divino y la misericordia fluyen a través del Universo y la misericordia fluyen a través del universo, pero el hombre está totalmente inconsciente de ello. Este fluir del perdón de Dios afecta igualmente a los justos y a los injustos; pero la norma parea el ser que desea avanzar en actuación consciente radica en el poder controlado de su atención.